La aventura industrial de la firma francesa Renault comienza en 1898 como la Societé Renault Frères, marca fundada por los hermanos Louis, Marcel y Fernand Renault.
En 1990 se crea el primer logotipo de Renault. Encerradas en un óvalo con cintas en la parte superior, aparecen las iniciales LR de Louis Renault en una tipografía barroca dispuestas simétricamente.
En 1906 el logotipo cambia por un círculo que encierra un engranaje y dentro de éste el frontal de un auto.
Durante las dos Guerras Mundiales, Renault trabaja para la industria bélica. En el transcurso de la I Guerra Mundial se encarga de la fabricación de un vehículo inventado por el general francés Joffre, el tanque de guerra. Adquiere tanta fama este carro de combate FT-17 que después del conflicto, en 1919, pasa a formar parte del logotipo Renault.
En 1923 desaparece la imagen del tanque y se introducen figuras geométricas. Continúa la forma circular pero dividida verticalmente por su diámetro. En el interior una serie de rayas gruesas horizontales forman una parrilla en cuyo centro aparece por primera vez la palabra Renault.
En 1925 el logotipo sufre uno de los cambios más significativos, la figura del rombo. Esta imagen aparece por primera vez en el modelo 40Hp. El rombo, relleno de líneas caladas horizontales, mantiene en el centro la palabra Renault.
Para la empresa, el rombo representa un diamante, intentando así proyectar una imagen corporativa fuerte y consistente. También su forma se debe, simplemente, a su abaratamiento en los costes de producción a la hora de adaptarlo a las formas angulosas de los vehículos de la época.
20 años más tarde, tras la absorción de Renault por el gobierno francés, se le añade debajo de la palabra Renault, en una tipografía menor, el texto «Regie Nationale». Se actualiza el rombo y se le da color con la intención de ganar más prestigio.
En 1959 se vuelven a producir pequeños cambios en el logotipo. Desaparece el color y la tipografía se hace más estrecha y alta, desapareciendo la frase «Regie Nationale».
Em 1972, Renault necesita actualizar su imagen corporativa y para ello recurren a un reputado artista de la época, Victor Vasarely. Proponer a un artista abstracto el diseño de un logotipo es una forma sencilla de mandar un mensaje de innovación y actualidad. Vasarely diseña por tanto un logotipo atrevido, que rompe con los anteriores, y en el que desaparece el nombre de la marca, quedando sustituído por un rombo que en realidad es una Cinta de Moebius. Una elegante forma de simbolizar un infinito de raíz muy actual, en el que la estética y la vibración del «Op Art» quedan bien patentes. Este logo se estrena en el Renault 5. La evolución del logo desde entonces ha sido mínima.
En los coches podemos verlo solo en negro y gris. Sin embargo para la red oficial Renault turismos, se asocia al color amarillo. Para vehículos industriales y agrícolas, es rojo y verde respectivamente.
En 1992, el rombo se hace más pequeño, simple y su relleno lo hace tridimensional. Debajo del rombo, en una tipografía grande y propia, la palabra Renault subrayada.
Ocho años más tarde, el rombo se presenta sobre un fondo rectangular amarillo y la palabra, con tipografía propia y grandes caracteres, a su lado derecho.
En 2007 se efectúa el cambio más reciente: sobre el rectángulo amarillo y debajo del rombo se coloca la palabra Renault en negro.
El diamante, con cerca de 90 años, sigue perdurando como símbolo de la marca y su significado de dureza y prestigio se mantiene vigente.
Salvador Zamora 